04 junio 2008

Una chica con suerte


La suerte ha estado de mi lado en múltiples ocasiones, aunque en algunos momentos haya podido pensar que me había abandonado, sé que siempre ha estado ahí.

El hecho de ser atrevida y emprendedora también me ha ayudado a la hora de tomar decisiones y el haber contado con la baza de la buena suerte ha sido cuestión de corrientes; es decir, a la suerte hay que invocarla, llamarla, hacerla un hueco y tener confianza en uno mismo...

He observado y comprobado que, si proyectas tus objetivos, siendo consciente siempre de tus limitaciones y de las cosas que no dependen directamente de ti, si los visualizas y estás atento a las señales, todo se irá poniendo en su sitio poco a poco. A veces nos sentimos frustrados cuando algo que deseamos no se cumple o no llega a buen término o al final no resulta como hubiéramos querido pero eso no tiene nada que ver con la mala suerte. Incluso me atrevo a decir que es parte de la buena suerte que a veces no se cumplan ciertas cosas que deseamos y que no sabemos la implicación que tienen si se hubieran realizado. Ocurre que, como no se cumplen esas espectativas, las deseamos con más ahínco y quizás nuestro inconformismo las convierta en "supuestas frustraciones" idealizadas.

Nada ni nadie, por muy insignificante que pudiera parecer su paso por tu vida, es casual. La vida da giros inesperados y a lo mejor alguien que pensaste que no podría aportarte nada, de repente un día te "salva". También hay veces, pero eso es condición humana, que nos empeñamos en que alguien nos quiera y se quede a nuestro lado, bien como pareja o como amigo, y estamos tan ofuscados en ello que no vemos que nos desprecian, el amor incondicional no es correspondido o que ni siquiera, se dan cuenta de que estamos ahí.

Sin embargo, luego está la cara opuesta, que todos hemos experimentado alguna vez, y es el de que haya alguien que nos ofrezca todo sin esperar nada a cambio y seamos nosotros los que no la veamos, en fin, estamos en un mundo loco donde el catalogado como "loco" tal vez sea el más cuerdo.

Un consejo, rodéate de gente optimista pero, sobretodo de gente que te quiera de verdad, que te acepte como eres y no te juzgue y si lo hace, perdónale porque también es una condición humana que muy pocos saben amaestrar. Aquéllos que no se merezcan tu cariño déjalos marchar que otros vendrán, valora la calidad y no la cantidad.

Insisto, soy una chica con suerte y doy gracias por todo lo que tengo y no tuve y por todo lo que tengo y nunca tendré. Esa determinada forma de vivir y todo aquello que nos depara la vida nos hace únicos y especiales. La vida es una partida intrepidante, no pierdas tu turno ni dejes de jugar, no temas equivocarte y aprende de tus propias experiencias y de las de los demás, ¡sé listo! y no te de vergüenza... sueña, vive, sonríe, disfruta...

¡¡Te deseo la Vida y mucha Suerte!!